Quimera
L1: 6a L2: 7a L3: 7a L4: 6b L5: 6a L6: 6a
máximo obligado: 6b
máximo obligado: 6b
La vía comienza tres o cuatro metros a la derecha de la Greim. Las chapas son de acero inoxidable pintadas de color azul.
El primer largo discurre todo en diagonal a la derecha. Primero por una canal diedro, 5b, para pasar luego en travesía a una gran repisa herbosa. Seguiremos una fisura en diagonal a la derecha con pasos en placa laterales, 5c, aunque se puede escalar directamente, 6a+. Un poco más arriba la fisura se transforma pudiéndose escalar en oposición y en diedro, 5c. De este saldremos a la izquierda en placa mediante una sucesión de aéreos pasos, 6a.
Este segundo largo es el más característico y espectacular de la vía. Comenzamos escalando el perfecto diedro que domina la reunión. Los pasos son elegantes y precisos, 5c/6a. Más arriba tendremos que hacer una corta travesía a la izquierda para escalar después en placa hasta un bloque cúbico encajado que superaremos por la izquierda, 5c/6a. Así nos pondremos bajo un techo que deberemos superar en travesía a la derecha, muy técnica y difícil, por la placa que lo mantiene, 7a. Nos podremos restablecer en la base de un par de fisuras paralelas que escalaremos directamente hasta la reunión, 6a.
El tercer largo consiste en una difícil y aérea placa sin desperdicio. Los primeros movimientos utilizan presas excelentes, 5b. Unos metros más arriba topamos con un muro compacto de dificultad progresiva con movimientos complicados, 6b/6b+. Tras una zona que afloja un poco los últimos pasos de la placa, antes de salir a una repisa herbosa, aprietan de nuevo, 7a. Unos metros en diagonal ascendente a la izquierda nos colocan en una estrecha plataforma que nos permiten una cómoda reunión.
El cuarto largo ataca el diedro justo a la derecha de la reunión. Inicialmente los pasos son más bien técnicos para transformarse después en una sucesión de atléticos movimientos en oposición, 6b, de los que escapamos saliendo a una repisa bajo otro marcado diedro, 6a. El diedro se negocia con pasos técnicos y abundantes cambios de plano, 6a. Continuamos verticalmente por un espolón poco marcado y muy fisurado, buscando la zona más compacta y elegante hasta alcanzar la reunión con una corta travesía a la derecha, 5c. La última parte de este largo, desde la repisa bajo el diedro, es común a las vías Greim y Quimera.
En el quinto largo salimos directamente de la reunión mediante unos pasos muy aéreos en placa, 6a, para colocarnos bajo unas fisuras que seguiremos hasta el final del largo. Estas fisuras, que se escalan también en placa, están formadas por una roca de gran calidad manteniéndose el nivel de los movimientos, sin grandes complicaciones, en 5c, quizás 6a. La reunión es un pequeño rellano, incómodo para más de dos personas. Este quinto largo y el último son comunes a las vías Greim, Luquemecu y Quimera
El último largo -es el sexto- de menos de 20 metros, comienza por una zona con un par de arbolitos, superando una fisura, 6a, que nos deja bajo un muro ligeramente desplomado. Este muro se negocia ligeramente en diagonal a la izquierda con movimientos un poco atléticos, 6a.
De aquí a las grandes plataformas bajo la cumbre sur de Cigal solo nos restan 20 metros de fácil trepada por repisas herbosas. Atención a las piedras y bloques sueltos.
El descenso se puede hacer por la ancha vira que nos lleva andando hasta abajo siguiendo las manchas amarillas. En fechas de nidificación conviene tomar un sistema de rápeles que se inicia en el primer hombro de la vira contando desde el cruce con la canal de Amigos. (50-50-30).
La vía es rapelable. Se recomienda encordarse en doble con dos cuerdas de 60. Vía equipada: llevar 14 cintas exprés y material para dos reuniones.
